QUINTANILLA DEL OLMO

Habitantes: 32

Historia

En los comienzos de la historia, los vacceos, pueblo de estirpe celtibérica, levantaban sus poblaciones fortificadas con muros de tapial y adobe, en los leves alcores, dedicándose a la agricultura de cereales, resistiéndose férreamente al avance de los romanos.

Estos llegaron desde el sur por la Vía de la Plata, desviándose hacia Intercatia, la capital vaccea, situada en un lugar indeterminado en esta zona, y cuando consolidaron su dominio integraron las tierras comprendidas entre el Esla y el Duero en el convento jurídico cluniense.

Los godos se instalaron en esta zona a la que llamaron “Campi gothorum”.

Tras la invasión musulmana y la posterior aparición del reino de León, Alfonso III decide iniciar su repoblación trayendo gascones y gentes del norte, foramontanos, y del sur, mozárabes, que pueblan los yermos y les dan nombre. El nombre significa “granja pequeña”. El lugar fue propiedad de Pedro Peláez, del séquito del rey Fernando II de León, vinculado al monasterio de San Salvador de Villacet, fundado por sus antepasados.

Quintanilla se integró muy tempranamente en el alfoz de Villalpando, junto con otros trece pueblos. A mediados del XIX se integran todas estas tierras en la moderna provincia de Zamora.

Puntos de Interés

La iglesia parroquial de San Babilés (Babilas) cuenta con una interesante portada gótica con arco escarzano con florones en las enjutas, enmarcado por pináculos cortados y ocultos por la bóveda del pórtico. Hasta comienzos del siglo XX poseyó un valioso retablo gótico hispano-flamenco con notables pinturas, trasladado a la Catedral de León, siendo sustituido por un impresionante retablo barroco procedente de la derruida iglesia de San Lorenzo de Villalpando.

La ermita del Cristo de la Luz es un sencillo edificio de tapial y ladrillo que alberga un valioso retablo recientemente restaurado.

Fiestas y tradiciones

Festejan al santo titular, San Babilés (24 de enero).

En Semana Santa, el día de Viernes Santo por la noche se pasea la imagen del Santo Cristo de la Luz por las calles del pueblo, entre las hogueras que encienden los cofrades a la puerta de sus casas.

Los vecinos de Quintanilla del Olmo confraternizan (1 de mayo) con los de la localidad vecina de Prado, saliendo simultáneamente (11 de la mañana) sendas procesiones desde las respectivas parroquias, hasta las de sus vecinos, en lo que se conoce popularmente como “La Rogativa”. Cuando se encuentran, a medio camino, los alcaldes intercambian sus varas de mando.